
Hoy hace justamente 4 años que estaba en este mismo hospital, nerviosa y con esa mezcla de ilusión y miedo que te invade cuando llega la maternidad. Hace 4 años que la oxitocina corría por mis venas, hace 4 años que nací como madre, porque una madre nace cuando lo hacen sus hijos, antes de ese momento es imposible comprender la amplitud de una palabra tan simple como MAMA, hace 4 años que la vida me dio mi regalo más valioso, hace 4 años que mi vida dió un giro de 360º convirtiéndome en la mujer más feliz de mi mundo, hace 4 años que me regalan la más bonita de sus sonrisas… quien iba a decirme que 4 años después sería la químio que me tendría aquí enchufada (lo digo literalmente, estoy con el portátil mientras pasa la químio)
¿Paradojas de la vida?
El 2 de Marzo de 2011 en la sala de preparto con la oxitocina a toda pastilla, sufriendo el dulce dolor de las contracciones ¡Cómo duelen! Pero como compensa, a esta hora incluso habían roto la bolsa de Èric pero no fue hasta las 14:30 y 14:35 que pude ver las caras de mis pequeñajos. Mi príncipe tranquilo y bonachón, todo dulzura y mi princesa puro nervio nació con 1.490kg reclamando “Aquí estoy yo” “He venido a comerme el mundo” .
Hoy, 2 de Marzo de 2015 en la sala 1 de Hospital de día, con mis queridas bolsas amarillas, acompañada por mi madre y mi marido…
¡Mi tercera químio!
Aquí todo el mundo es tan amable que te sientes como en casa y la verdad es que es de agradecer, mi madre se quedará tranquila al ver que esto no es tan malo como nos imaginamos, aquí todo transcurre en un entorno de paz, respeto y me atrevería a decir que incluso de alegría y felicidad. Alegría por las visitas inesperadas que te arrancan una sonrisa, felicidad por alguien que acaba su tratamiento, que bonito es ver el brillo en los ojos de alguien a quien le acaban de decir que se acabó su lucha, que es un vencedor… No sabría muy bien como describirlo pero es una mirada llena de emoción, llena de nobleza, llena de tantísimos sentimientos que contagian parte de su felicidad… Todo el equipo sanitario parece que se ha educado en la universidad de la empatía, todos, absolutamente todos son amables y cariñosos.
No sé como serán los efectos del 3er. Round pero hoy es un día más que especial para mi y no quiero pensar en nada más que no sean mis hijos cuando esta mañana se han fundido en un abrazo para felicitarse por su cumpleaños. Antes de que nacieran me asustaba no hacerlo bien, me daba miedo no ser capaz de enseñarles todas las cosas importantes, nunca pensé que serían ellos quienes realmente me enseñarían a mi…
Gràcies Èric i Martina per donar-me tota la força, sou el nostre petit miracle, els nostres superherois // Gracias Èric y Martina por darme toda la fuerza, sois nuestro pequeño milagro, nuestros superhéroes.
Gracias también a vosotros por estar siempre acompañándome en mi lucha, espero que seáis muy felices… “Abrid los ojos a la felicidad”