
Es cierto que las grandes locuras terminan por ser grandes recuerdos, he vivido un fin de semana súper intenso a todos los niveles, el sábado por la mañana salimos camino a Olot para enfrentarnos al reto TRAILWALKER, recorrer a pie los 100km que nos separaban de la meta, en mi pueblo, si afrontarte a algo así ya es duro, imaginaros cómo debe ser hacerlo cuando una aún está en tratamiento, reconozco que hasta yo misma, en algún momento, cuando los ataques de dolor en todas las articulaciones eran incesantes, he dudado de si sería capaz de hacerla y me he llegado a preguntar ¿Qué precio pagaría? ¿Sería demasiado alto? ¿Una recuperación muy dura? Tenía decenas de preguntas sin respuesta pero un reto muy claro, quería este TRAILWALKER, me vais conociendo y sabéis como soy de tozuda, así es que incapaz de dar marcha atrás y contra todo consejo… TRAILWALKER 2016, allá vamos!
Aquí el equipo de marchadores al completo
A la salida, con 100km por delante, de izquierda a derecha, Kike, Emma, Lluïsa, Dolo, Vane, Judit, Raquel, Juli.
Este ultra trail solidario es una prueba de equipo, cada equipo se compone por 4 marchadores + 2 personas de soporte que te siguen durante todo el recorrido y te esperan en cada avituallamiento para cubrir todas las necesidades del equipo.
Cuando dije aquello de <<“Voy a hacer el TRAILWALKER”>> en un abrir y cerrar de ojos éramos los suficientes como para tener que inscribir a dos equipos, compaginar y compartir entrenos de tantísimas horas no penséis que es tarea fácil, mamis con mil tareas que atender y con agendas apretadas, con días post químio dónde todo duele…
Compartir 100km es mucho más que un reto deportivo, son 33h sin dormir , subidones de adrenalina, bajones de moral, lágrimas de dolor, apretar los dientes y decir lo hacemos juntos, de cuidarnos y animarnos los unos a los otros y finalmente de acabar hasta gritando, YA LO TENEMOS, LO ESTAMOS HACIENDO, ES REAL!!!!…
Si para un equipo de 4 marchadores es un reto, imaginad en un equipo de 8 o 10, porqué en la gran parte del trayecto nos acompañaron dos de soporte, no tengo palabras para el EQUIPAZO que hemos formado.
Superar estos 100km para mí ha sido mucho más que ser Finisher de el Trailwalker, he vivido momentos que jamás olvidaré. En un punto de recorrido me esperaba Yolanda, una SUPERWOMAN en mayúsculas, el día anterior había terminado su última quimio y allí estaba, esperándome con parte de su familia y una pancarta para darme ánimo, eso es emoción en estado puro, creo que acabamos todos llorando. La cantidad de amigos y familia que nos han acompañado en diferentes tramos, o que se han desplazado km sólo para vernos 3 escasos minutos y darnos un abrazo, los que te acompañan tooooda la noche, los que montan avituallamiento con música en mitad del camino, quien te espera con un caldo y croquetas caseras a las tantas de la madrugada. Trailwalker nos has hecho sufrir pero nos has dado momentazos únicos.
Gracias equipo, sé que para vosotros también era más que un desafío deportivo, sé que era una manera de apoyarme, una manera de decirme que estáis conmigo y así lo siento tanto por parte del equipo como por todos los que nos han acompañado haciendo más ameno nuestro camino.
No pasaré por alto que para poder inscribirnos era necesario recaudar un buen número de € en donativos para Intermon Oxfam y no hubiera sido posible sin la ayuda de toda la familia y amigos, y sobretodo no hubiera sido posible sin nuestros patrocinadores, muchísimas gracias a:
Banc Sabadell, City AD, Clínica Dental Dra.Gonzàlez Oliver, Free Assessors, Ginesta, Grup SAIS, Immo Invest Platja d’Aro, Immobiliària Alsemar, KABLER Estamos Conectados, Marlong Branding, Nonna Roba i Complements, Nuduka Perruquers, PP’S Park, Sanivet Osona, Teresa Tello, Terp-Vet Osona, Viñas Perruqueria d’homes y Fisioteràpia Goretti Font a quien además de agradecerle el patrocinio le agradecemos que cuidara de nosotros y nos pusiera a punto a mitad del camino, eso nos permitió continuar en las mejores condiciones, y el broche de oro para nuestra Idoia Pascalet Podologia Esportiva, ella ha sido la parte más IMPRESCINDIBLE de este TRAILWALKER, todos te debemos mucho Idoia, todos te sentimos como una más del equipo, ha sido un placer compartir esta experiencia contigo y has hecho verdaderos milagros con nuestros pies, no me creo que hayas salvado hasta mis uñas quimioterapiadas. ¡¡¡GRACIAS!!!!
Aquí un poco de nuestra experiencia:

Al poco de la salida con mi MITAD

Allá por Bescano, casi la mitad del recorrido

En algún punto de la larga noche

Equipo, soporte y algún generoso acompañante, en Cassà

Cerca de la llegada, con un recibimiento precioso

Equipoooooooo

Daños colaterales… Muy escandaloso pero en realidad no es nada, teníamos una podóloga con unas manos de oro.

Al agua patos, hasta aquí nuestra aventura…
Balance súper mega positivo, estoy encantada de haberlo planteado, de seguir adelante con el reto aún cuando me enteré de que estaría en tratamiento, de haberlo vivido y me ha hecho muy feliz haberlo conseguido.
Sorprendida estoy por haberlo logrado en tan buenas condiciones, me esperaba una llegada más al estilo de The walking dead y para nada lo fue, no sé si estaba tan mentalizada de lo durísimo que sería o que mi aguante está en un escalón muy alto, al fin y al cabo, he pasado días post quimio muchísimo peores, el caso es que puedo decir bien alto: ¡RETO CONSEGUIDO!